La administración Trump propone un programa por el cual los niños migrantes no acompañados pueden recibir 2,500 dólares para regresar voluntariamente a sus países, generando controversia.

Una nueva iniciativa de la administración Trump prevé ofrecer 2,500 dólares a los niños migrantes no acompañados para que regresen voluntariamente a sus países, una medida considerada sin precedentes. Aunque la salida voluntaria ha sido una opción, los incentivos financieros generan preocupaciones sobre la explotación de las vulnerabilidades de estos menores. Activistas y expertos advierten que la política podría contradecir las protecciones legales existentes y podría afectar gravemente a las familias de migrantes. Las críticas se centran en los riesgos de trata y en cómo se utilizan a los niños en las operaciones de deportación.