Los policías de frontera de Calafat han descubierto 38 migrantes de origen afroasiático escondidos en un camión matriculado en Bulgaria

El jueves por la mañana, los policías de frontera de Calafat, en colaboración con las autoridades búlgaras, detuvieron un camión registrado en Bulgaria, que circulaba por la ruta Bulgaria-Polonia. El vehículo, conducido por un ciudadano búlgaro, transportaba placas de aglomerado, según los documentos de acompañamiento. Tras el control, se descubrieron 38 personas de origen afro-asiático escondidas en la semirremolque. Estas incluían 29 ciudadanos iraquíes, 5 iraníes, 2 sirios, un turco y un sudanés. Después de la detección, se movilizaron fuerzas adicionales para gestionar la situación. Según el plan de cooperación entre la Policía de Frontera Rumana y la Búlgara, los migrantes y los conductores fueron entregados a las autoridades búlgaras para continuar las investigaciones.