La investigación de corrupción que involucra a Federica Mogherini, exrepresentante de la UE para asuntos exteriores, podría provocar una crisis política significativa en la Unión Europea, según POLITICO. La Fiscalía Europea ha retenido a Mogherini y a un diplomático de alto rango, teniendo sospechas de fraude en adquisiciones públicas relacionadas con una licitación para una academia diplomática. Los críticos de Ursula von der Leyen, actual presidenta de la Comisión Europea, utilizan este escándalo para solicitar un voto de desconfianza en su contra. Si las acusaciones resultan ser ciertas, el escándalo podría ser comparable a la dimisión en masa de la Comisión Jacques Santer en 1999. Las relaciones entre von der Leyen y la actual jefa de la diplomacia de la UE, Kaja Kallas, ya están tensas, y la investigación podría intensificar las críticas hacia su liderazgo. Los partidos euroescépticos y populistas se benefician de esta situación para subrayar un supuesto doble rasero en la gestión de la corrupción a nivel nacional frente al europeo. La Unión Europea también ha sido afectada por escándalos de corrupción, incluido el caso 'Qatargate', que implicó la influencia de europarlamentarios a través de sobornos.
Fuentes