Muchos países no han asegurado alojamiento para la cumbre COP30 en Brasil, y los altos costos de los hoteles hacen que algunas delegaciones consideren la ausencia.

La cumbre COP30, programada entre el 10 y el 21 de noviembre en Belém, Brasil, enfrenta una crisis de alojamiento, con decenas de países aún en negociaciones para habitaciones de hotel. Los precios exorbitantes, que alcanzan cientos de dólares por noche, hacen que algunos delegados consideren no participar. Los organizadores están buscando soluciones alternativas, como convertir moteles y barcos en unidades de alojamiento, pero muchas naciones, especialmente las de bajos ingresos, enfrentan dificultades financieras.