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Un cirujano del Hospital de Sinaia se enfrenta a acusaciones de mala praxis después de que una mujer de 34 años entrara en coma tras una intervención quirúrgica de rutina. La paciente presentó complicaciones postoperatorias y fue transferida al Hospital Fundeni de Bucarest, donde su estado fue evaluado como grave, siendo mantenida con vida con la ayuda de aparatos. Las mismas acusaciones también afectan al médico en cuestión, quien en 2018 olvidó gasas estériles en el abdomen de una niña de 10 años, lo que llevó a la apertura de un expediente penal, que fue archivado posteriormente. El hospital de Sinaia declaró que la intervención fue inicialmente favorable, pero iniciará una investigación interna. La familia de la paciente está considerando abrir un expediente de mala praxis contra el médico.