El Ministro de Energía, Bogdan Ivan, declaró que Rumanía aplicará las sanciones internacionales contra Lukoil y que el acto legislativo relacionado con los activos de la compañía se finalizará esta semana. Subrayó que no hay motivos para el aumento del precio de los combustibles y pidió verificaciones por parte del Consejo de la Competencia.
Ivan mencionó que se colabora con las autoridades de EE. UU. y el Reino Unido para asegurar una correcta implementación de las sanciones, protegiendo al mismo tiempo a las empresas rumanas. Rumanía y Bulgaria están en competencia para evitar el cierre de las refinerías de Lukoil antes de la aplicación de las sanciones, y Bucarest está considerando solicitar una derogación. Estas medidas tienen implicaciones también para otros países de la UE, como Alemania, que ha obtenido una derogación para la refinería de Schwedt.
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