Donald Trump propone el despliegue de empresas de seguridad estadounidenses en Ucrania para apoyar los esfuerzos de paz y proteger los intereses estadounidenses.

El plan discutido por Trump con los aliados europeos busca la implicación de contratistas estadounidenses en la construcción de fortificaciones y la protección de intereses en Ucrania, sin tropas oficiales. Rumanía podría desempeñar un papel esencial, facilitando el transporte de equipos militares y participando en misiones navales en el Mar Negro. El plan incluye la formación de tropas ucranianas y la creación de zonas de amortiguamiento desmilitarizadas, con el objetivo de disuadir la agresión rusa. El escepticismo persiste en cuanto al compromiso de Rusia, pero la presencia estadounidense y europea se considera esencial para la estabilidad.