El jueves, el Tribunal Supremo de Rusia declaró a la Fundación Anticorrupción (ACF) de Alexei Navalny como organización terrorista, una decisión que agrava la represión sobre la red del antiguo líder de la oposición. ACF, registrada en EE. UU., asumió las actividades de la Fundación Anticorrupción original, que ya había sido clasificada como "organización no deseada" en 2021. El juez Oleg Nefiodov afirmó que las actividades de ACF promueven el terrorismo, y la audiencia fue cerrada al público, con la aplicación inmediata de la decisión.
ACF condenó la decisión como una táctica política destinada a suprimir las críticas y a afectar la recaudación de fondos. Amnistía Internacional advirtió que esta etiqueta podría llevar a represalias severas contra los partidarios del grupo. La presión sobre el movimiento de Navalny continuó incluso después de su muerte en prisión en febrero de 2024, y sus aliados sostienen que fue envenenado, acusación rechazada por el Kremlin.
Fuentes