Las autoridades británicas están estudiando conceder a Google el estatus de "actor de posición estratégica", lo que podría dar lugar a una estricta regulación de sus servicios de búsqueda.

La Autoridad de Competencia y Mercados del Reino Unido (CMA) ha puesto en marcha una consulta pública para evaluar si debe concederse a Google la categoría de "operador estratégico del mercado". Esta categorización, introducida por la Ley de Mercados Digitales, permite a la CMA imponer medidas estrictas, incluidas multas sustanciales. Si Google recibe esta designación, tendrá que implantar medidas como pantallas de elección para los usuarios, clasificación equitativa de los resultados de búsqueda y portabilidad de datos. Google ha advertido de que estos cambios podrían afectar significativamente a las empresas y los consumidores del Reino Unido.