En el contexto de una posible agresión rusa, Alemania se está preparando para convertirse en el principal nodo de transporte para las unidades de la OTAN, según un plan operacional elaborado por la Bundeswehr. Este documento secreto, elaborado en los últimos 2,5 años, detalla el traslado de 800.000 soldados alemanes, estadounidenses y de otros países de la OTAN hacia el este, indicando las rutas de transporte, los puertos y los métodos de aprovisionamiento. Los expertos militares estiman que Rusia podría lanzar un ataque contra los países de la OTAN en un plazo de 2 a 5 años, y Alemania, teniendo un papel central, deberá facilitar el movimiento de las tropas a través de su territorio.
Además, se está desarrollando un sistema de 'Schengen militar' para estandarizar las reglas de transporte rápido de soldados y equipos. El objetivo de estas medidas es disuadir la agresión mediante la demostración de la disponibilidad de una reacción rápida.