Lukoil ha solicitado la prórroga del período de gracia para finalizar los compromisos actuales y evaluar las ofertas de adquisición de sus activos externos, incluida la refinería Petrotel Ploiești y la red de gasolineras en Rumanía. Esto ocurre después de que la propuesta de venta al trader Gunvor fue rechazada por las autoridades estadounidenses. El presidente de Rumanía, Nicușor Dan, mencionó que el estado rumano podría asumir temporalmente la refinería, teniendo en cuenta las sanciones impuestas a Lukoil.
El ministro de Energía, Bogdan Ivan, subrayó la necesidad de asumir el control sobre las operaciones de Lukoil para proteger la seguridad energética de Rumanía. Aunque inicialmente se discutió una posible prórroga del plazo de aplicación de las sanciones, Ivan declaró que no solicitará esto y que Rumanía respetará el régimen de sanciones establecido por EE. UU. La refinería Petrotel Ploiești, que asegura aproximadamente el 20% de la capacidad de refinación del país, está cerrada por mantenimiento, y su futuro permanece incierto en el contexto actual.
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