 
            La Corte de Apel de Madrid ha confirmado que la UEFA abusó de su posición dominante, intentando impedir la creación de la Superliga europea de fútbol en 2021. Esta decisión llega tras la resolución del TJUE de 2023 y subraya que la UEFA y la FIFA han actuado de manera discrecional, prohibiendo a los clubes europeos participar en competiciones alternativas. El Real Madrid, uno de los iniciadores del proyecto de la Superliga, ha acogido con satisfacción la decisión y ha declarado que esto abre el camino para compensaciones por los daños sufridos.
Aunque el futuro de la Superliga sigue siendo incierto debido a la oposición de los aficionados y al éxito de la Liga de Campeones, el Real Madrid continúa impugnando las regulaciones de la UEFA, argumentando que estas no garantizan una gobernanza transparente y sostenible. El impacto de esta decisión en el fútbol europeo aún es incierto, teniendo en cuenta que la UEFA adoptó nuevas regulaciones en 2022. Los promotores de la Superliga, A22 Sports Management, sostienen que están autorizados a crear la competición, dado que la UEFA ya no puede intervenir.
 
                             
                             
             
             
                 
                 
                 
             
                 
                 
                 
                 
             
             
                 
                 
                 
             
                 
                 
                 
                 
             
                 
                 
             
                 
                 
    