El 8 de noviembre, la Iglesia Ortodoxa celebra el Sínodo de los Santos Arcángeles Miguel y Gabriel, protectores de los hombres y símbolos del bien.

El 8 de noviembre, la Iglesia Ortodoxa celebra la Fiesta de los Santos Arcángeles Miguel y Gabriel, una festividad importante en el calendario cristiano. Los fieles honran a estos líderes de los ejércitos celestiales, simbolizando la victoria del bien sobre el mal. El Arcángel Miguel, defensor de la fe, es representado con una espada, y su nombre significa "¿Quién como Dios?". El Arcángel Gabriel, mensajero de los misterios divinos, a menudo es representado con un lirio, simbolizando la pureza.

En este día, las personas encienden velas por las almas de los difuntos y participan en servicios religiosos. Las tradiciones populares incluyen la prohibición de trabajar, el encendido de fuegos para ahuyentar a los espíritus malignos y la ofrenda de panes y manzanas en la iglesia. Se cree que el Arcángel Miguel lleva las llaves del Paraíso y que las almas de los que han partido reciben la luz de las oraciones.

Más de 1,3 millones de rumanos celebran su onomástica el 8 de noviembre, y la festividad es un momento de alegría y reflexión espiritual. Los sacerdotes instan a la gratitud y la fe, subrayando el papel de los ángeles como guardianes de las personas. La Fiesta de los Santos Arcángeles es un día de luz, coraje y esperanza, recordando la protección divina en la vida de cada uno.