Ucrania ha acusado a Rusia de enviar a niños ucranianos secuestrados a territorios ocupados en campamentos de 'reeducación' en Corea del Norte, donde son sometidos a procesos de 'rusificación' y 'militarización' forzada. El defensor del pueblo ucraniano, Dmitro Lubinets, ha subrayado la importancia de encontrar y proteger a estos niños, afirmando que no pueden ser utilizados como armas por el agresor. En una audiencia en el Senado de EE. UU., Katerina Racevska, de una organización no gubernamental, declaró que se han identificado 165 campamentos de reeducación, incluidos en Corea del Norte, donde los niños son entrenados para luchar contra los enemigos.
Ucrania sostiene que Rusia ha secuestrado al menos 20,000 niños desde el inicio de la invasión en febrero de 2022, de los cuales solo 1,850 han sido recuperados. La Corte Penal Internacional ha emitido una orden de arresto contra Vladimir Putin por la deportación ilegal de niños, mientras que Moscú niega las acusaciones, afirmando que ha salvado a estos niños de la guerra. La Asamblea General de la ONU ha pedido la inmediata devolución de los niños transferidos por la fuerza a Rusia, subrayando la gravedad del problema en el contexto de las negociaciones de paz.
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