Donald Trump y Javier Milei se encontraron en la Casa Blanca, poco después de que EE. UU. anunciara una ayuda financiera significativa para Argentina, destinada a estabilizar el tipo de cambio antes de las elecciones legislativas del 26 de octubre. Trump afirmó que el apoyo de EE. UU. depende del éxito del partido de Milei, subrayando que, si este no gana, EE. UU. no continuará apoyándolo. Los comentarios de Trump afectaron los mercados argentinos, y la ayuda financiera, que incluye un intercambio de 20 mil millones de dólares, fue criticada por los políticos demócratas en EE. UU. y por los agricultores estadounidenses. La ayuda financiera podría ofrecer un impulso político necesario, pero ha sido cuestionada por la oposición argentina, que acusa a EE. UU. de intervencionismo. La ex presidenta Cristina Kirchner criticó la ayuda como una trampa, mientras que otros políticos del partido de Milei sostienen que no debería ser politizada.
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