Rusia ha declarado que las tropas ucranianas en las ciudades de Pokrovsk y Kupiansk están rodeadas y que no tienen ninguna posibilidad de supervivencia, exigiéndoles que se entreguen. Moscú intenta conquistar Pokrovsk, considerado una puerta de acceso hacia Donetsk, desde 2024, como parte de una estrategia para tomar el control de la región de Donbás, donde las fuerzas ucranianas controlan actualmente aproximadamente el 10% del territorio.
Las tácticas de Rusia incluyen movimientos de pinza, que han creado una zona gris de ambigüedad, complicando la defensa de Ucrania. Los mapas muestran que las fuerzas rusas se encuentran a pocos kilómetros de la completa cercanía de Pokrovsk y controlan una parte de Kupiansk. El Ministerio de Defensa ruso ha contradicho las afirmaciones del presidente Zelenski, sosteniendo que las posiciones ucranianas se están deteriorando rápidamente. Rusia controla ahora más del 19% del territorio de Ucrania, avanzando en las regiones de Járkov y Dnipropetrovsk.