Tras una reunión en la cumbre del G20 en Johannesburgo, los líderes de 11 países y de la Unión Europea rechazaron el plan de paz propuesto por EE. UU. para Ucrania en su forma actual, subrayando que este representa solo una 'base' para discusiones y necesita 'esfuerzos adicionales'.
El proyecto en 28 puntos incluye elementos esenciales para una paz justa, pero los líderes expresaron su preocupación por las limitaciones impuestas a las fuerzas armadas ucranianas, que podrían hacer a Ucrania vulnerable a futuros ataques. También reafirmaron el principio de que las fronteras no deben ser modificadas por la fuerza y insistieron en la necesidad del consentimiento de los miembros de la UE y la OTAN para los elementos del plan. El plan de EE. UU. propone la cesión de la región de Donbas a Rusia e impone restricciones a las fuerzas armadas ucranianas, lo que ha provocado reacciones negativas por parte de los aliados.
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