31 julio 19:48

Internacional
Foto Ukrinform / Shutterstock Editorial / Profimedia
Durante una visita oficial a Chipre, Jean-Noel Barrot pidió el cese de las actividades de la Fundación Humanitaria de Gaza, afirmando que la distribución militarizada de ayuda había causado un "baño de sangre" entre la población civil. Este hecho se produce en medio de un informe que advierte de una grave crisis de hambre en Gaza, donde aumentan la desnutrición y las muertes infantiles por falta de alimentos. La ONU calcula que más de 1.000 civiles han muerto a manos de las fuerzas israelíes cerca de los centros de distribución, y las FDI han admitido que se han producido incidentes en los que civiles han resultado heridos.