El ejército de Benín ha anunciado, a través de la televisión nacional, que ha llevado a cabo un golpe de estado, destituyendo al presidente Patrice Talon y suspendiendo la constitución. Se escucharon disparos de armas cerca de la residencia presidencial, y los soldados declararon que el país será dirigido provisionalmente por el teniente coronel Tigri Pascal, a través de un consejo militar de transición. Justificaron la acción por el descontento con la forma en que Talon había administrado el país, que debía concluir su mandato en 2026.
El golpe de estado ocurre poco después de un incidente similar en Guinea-Bisáu, destacando una preocupante tendencia de inestabilidad militar en la región de África occidental, donde varios países, como Burkina Faso y Malí, son gobernados por gobiernos militares.
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