Francia sostiene que está preparada para desarrollar por sí sola un nuevo avión de combate que reemplace al Eurofighter, si las negociaciones con Alemania fracasan.

Los funcionarios franceses de Dassault Aviation subrayan que pueden construir un avión de combate de nueva generación sin Alemania, apoyados por subcontratistas europeos. Las tensiones entre París y Berlín están aumentando, con Alemania explorando opciones alternativas. Los problemas centrales incluyen el control del proyecto y las características técnicas de la aeronave, Francia deseando un modelo más ligero, mientras que Alemania prefiere uno más pesado. La fecha límite para la finalización del avión es 2040, y los cambios en el liderazgo político complican aún más las negociaciones.