El jefe de la agencia de inteligencia nacional de Australia, Mike Burgess, advierte del espionaje extranjero dirigido contra empleados de defensa y la asociación AUKUS.

El director de la ASIO, Mike Burgess, ha anunciado que los agentes de inteligencia extranjeros se están interesando cada vez más por la asociación AUKUS, cuyo objetivo son los empleados de defensa que trabajan en las capacidades nucleares de Australia. En los últimos tres años, la ASIO ha desbaratado 24 operaciones de espionaje, cuyo coste se estima en 12.500 millones de dólares anuales. Burgess destacó los riesgos asociados a las publicaciones en las redes sociales de los empleados de defensa, señalando que países como China, Rusia e Irán son los principales implicados en estas actividades.