La Comisión Europea ha adoptado medidas para mejorar la circulación de la energía en la UE, reduciendo los precios y asegurando la independencia energética.

Miércoles, la Comisión Europea adoptó un paquete de medidas destinadas a facilitar la circulación eficiente de la energía en todos los Estados miembros, integrando la energía limpia y acelerando la electrificación. Estas medidas tienen como objetivo reducir los precios de la energía y asegurar una vida asequible para los europeos, en el contexto en el que Europa reduce su dependencia de las importaciones de energía de Rusia. La Comisión también propone modalidades adicionales de financiación para adaptar la infraestructura energética a los requisitos futuros, subrayando la importancia de una distribución equitativa de los costos.

Entre las iniciativas importantes se encuentra la realización de ocho autopistas energéticas, para las cuales la Comisión se compromete a acelerar la implementación mediante la coordinación política y la colaboración con grupos regionales. Aunque se han registrado avances, la Unión Europea no ha alcanzado el nivel necesario de interconectividad, y la falta de acción expone a los Estados miembros a la volatilidad de los precios y a riesgos geopolíticos. En 2024, los precios de la electricidad en la UE fueron significativamente más altos en comparación con los de China y EE. UU., destacando la necesidad urgente de reformas en el sector energético.