El gobierno federal de Bélgica ha finalizado un paquete presupuestario de 9,2 mil millones de euros hasta 2029, tras 20 horas de negociaciones. Entre las medidas clave se encuentra el aumento gradual de los impuestos sobre el gas natural para los hogares y la reducción de los impuestos sobre la electricidad. Además, el IVA se ajustará para diversos bienes y servicios, sin un aumento generalizado del impuesto. Se introducirá un nuevo impuesto de 2 euros para los paquetes de fuera de la UE, y el impuesto sobre los activos financieros se duplicará.
La reforma fiscal comenzará en 2026, con modificaciones al salario mínimo, y los salarios de los parlamentarios y ministros se congelarán. El objetivo es reintegrar a 100,000 personas en el trabajo hasta 2029, generando ahorros de 2 mil millones de euros. El acuerdo finaliza las reformas anunciadas anteriormente, incluyendo la flexibilización del mercado laboral y la reforma de pensiones. El primer ministro Bart De Wever describió la negociación como compleja, y el acuerdo será presentado al parlamento.