El 17 de agosto, el tiempo depara fuertes chubascos y tormentas en el oeste y el centro del país, mientras que en el sur persiste la ola de calor, con temperaturas que alcanzan los 36 grados.

El domingo, el tiempo será inestable, con fuertes chubascos y tormentas en el oeste, el centro y el norte, mientras que el sur de las llanuras rumanas tendrá temperaturas abrasadoras de 35-36 grados. En Dobrogea y Bărăgan se prevé un día despejado con máximas de 34 grados. En Transilvania se esperan chubascos y fuertes rachas de viento. Bucarest tendrá un mediodía abrasador, pero el lunes refrescará, con chubascos y tormentas. En las montañas aumentará la inestabilidad, mientras que en la costa seguirá haciendo buen tiempo, con temperaturas de hasta 30 grados.