Una red de médicos y farmacéuticos de Bucarest y de todo el país está siendo investigada por vender ilegalmente medicamentos oncológicos, lo que afecta a pacientes de cáncer.

Los investigadores han descubierto una trama de fraude en la que médicos y farmacéuticos vendían medicamentos oncológicos financiados por el Estado a empresas de Alemania. Los enfermos de cáncer, en lugar de recibir los tratamientos necesarios, recibían dinero para venderlos a los médicos, que emitían recetas falsas. Los fármacos, por valor de hasta 4.000 lei, se vendían a mitad de precio en el extranjero. La policía llevó a cabo 39 redadas en Bucarest y 9 condados, y las investigaciones continúan.