La misión Chang'e 6 trajo muestras de suelo de la cara oculta de la Luna, confirmando la hipótesis de un océano de magma en el pasado lunar.

Recientemente, la misión Chang'e 6 trajo a la Tierra 1.935,3 gramos de muestras de suelo lunar, lo que aporta pruebas de la existencia de un océano de magma en la Luna. Los estudios de la Academia China de Ciencias Geológicas han mostrado similitudes y diferencias entre estas muestras y las recogidas por las misiones Apolo. El impacto que creó la cuenca del Polo Sur-Aitken alteró la composición química de la Luna, y futuros análisis podrían aportar nuevos datos sobre su evolución.