23 septiembre 11:07

Salud
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Greenpeace Francia ha solicitado la prohibición del hexano, un disolvente utilizado en la extracción de aceites vegetales, de la industria alimentaria, invocando los riesgos para la salud. Un informe de la organización ha identificado residuos de hexano en 36 de 56 productos analizados, incluidos aceites y leche en polvo para bebés. Aunque las cantidades están por debajo de los límites regulados, Greenpeace considera que las regulaciones actuales están desactualizadas. La Comisión Europea ha comenzado una reevaluación de la seguridad del hexano, y una comisión parlamentaria en Francia analizará su impacto en la salud.