Sorin Grindeanu, el presidente interino del PSD, declaró que Rumanía puede perder 200 millones de euros si la ley de pensiones de los magistrados no es aprobada hasta el 28 de noviembre

Él criticó las inequidades actuales, mencionando que los rumanos no aceptan que algunos magistrados se jubilen a edades muy tempranas con pensiones exorbitantes. Grindeanu propuso la rápida constitución de un grupo de trabajo formado por miembros del PSD, PNL, USR y representantes de la justicia para elaborar un proyecto de ley. Expresó su preocupación por la falta de diálogo entre el gobierno y los tribunales de justicia, subrayando que un enfoque eficaz es esencial para evitar un nuevo fracaso legislativo. Grindeanu insistió en que es crucial que los políticos colaboren para crear leyes justas y equitativas, evitando una simple competencia de imagen.