 
            El Ministro de Inversiones y Proyectos Europeos, Dragoș Pîslaru, subrayó que Rumanía debe convertirse en un país donde el trabajo sea recompensado, no los privilegios. Comentó la reciente decisión del Tribunal Constitucional, que declaró inconstitucional la ley sobre las pensiones de los magistrados, subrayando la necesidad de un sistema de pensiones justo y sostenible para todos los ciudadanos, independientemente de su profesión.
Pîslaru destacó las discrepancias actuales, donde algunos se benefician de pensiones muy altas, mientras que otros apenas pueden cubrir sus gastos básicos. Afirmó que la reforma de las pensiones especiales es esencial para normalizar el sistema fiscal y espera la motivación del Tribunal para determinar los próximos pasos.
 
                             
                             
             
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