El presidente de la ANAF, Adrian Nica, declaró que la institución no verificará a los novios, sino que seguirá a los organizadores de bodas que cobran sumas que deben ser declaradas.

ANAF se concentra en identificar a las personas que organizan bodas y recaudan dinero, para asegurarse de que estas sumas sean declaradas fiscalmente. Nica subrayó que ANAF no desea molestar a los novios ni intervenir en la organización de las bodas. También mencionó el problema de la evasión fiscal en los restaurantes, donde los pagos en efectivo no están respaldados por recibos fiscales, y anunció una aplicación similar a la de Grecia para la verificación de los recibos fiscales.