Scottish Wildlife Trust ha sacado a concurso un puesto de ranger para la Isla Handa, una isla deshabitada en el noroeste de Escocia, con un contrato de seis meses, de marzo a septiembre. La vida en la isla es aislada, sin acceso a tiendas o servicios modernos, y el ranger tendrá responsabilidades complejas, incluyendo la monitorización de la fauna salvaje, la coordinación de voluntarios y la gestión de visitantes.
La isla, conocida por su biodiversidad, alberga decenas de miles de aves marinas y ofrece una experiencia única de convivencia con la naturaleza. El ranger vivirá junto a los voluntarios, sin la intimidad habitual, y deberá manejar el aprovisionamiento y otras tareas logísticas. El salario anual es de 26.112 libras esterlinas, proporcional al período de contratación, y el alojamiento está asegurado. El último residente permanente abandonó la isla en el siglo XIX, dejando que la naturaleza tomara el control.
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