En Tanzania, más de 250 personas han sido acusadas de 'traición' y 'conspiración para cometer traición', tras las manifestaciones violentas que tuvieron lugar después de las recientes elecciones. Estas acusaciones están relacionadas con el intento de impedir las elecciones presidenciales y legislativas de 2025.
El viernes, cientos de acusados fueron llevados ante el tribunal de Dar-es-Salaam. El partido de oposición Chadema informó sobre la detención de su secretario general adjunto, Amani Golugwa, dejando solo a tres de los seis líderes del partido en libertad. Las manifestaciones, que estallaron espontáneamente el 29 de octubre, fueron reprimidas violentamente, con un saldo estimado por Chadema de al menos 800 muertos.
La presidenta Samia Suluhu Hassan ganó el escrutinio con un 98%, pero su credibilidad ha sido cuestionada por los observadores internacionales. Las autoridades se han negado a proporcionar un balance oficial de las víctimas, mientras que la información sobre la represión ha comenzado a aparecer en las redes sociales.
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