El gobierno regional de Tíbet ha decidido que la lengua tibetana deje de ser asignatura obligatoria en los exámenes de acceso a la universidad, en el marco de una reforma educativa.

La reforma educativa del Tíbet establece que el tibetano dejará de ser una asignatura obligatoria en el examen nacional de acceso a la universidad, conocido como "gaokao", a partir de 2024. El presidente del gobierno regional, Karma Tsetan, ha asegurado que el tibetano seguirá siendo una asignatura básica en la educación primaria y secundaria. Las críticas de los medios de comunicación tibetanos en el exilio subrayan los riesgos de marginación de la lengua tibetana, al considerar la reforma una amenaza para la cultura tibetana y el uso de la lengua en la educación. Se han observado cambios similares en otras regiones chinas de minorías étnicas.