En Francia, el jefe del ejército, el general Fabien Mandon, ha provocado controversias por sus declaraciones sobre la preparación de la nación para posibles pérdidas humanas en caso de un conflicto militar. Hablando ante los alcaldes de todo el país, subrayó la necesidad de aceptar el sufrimiento para proteger los valores nacionales, en el contexto de las crecientes amenazas por parte de Rusia.
Mandon afirmó que la vacilación para aceptar las pérdidas podría exponer a Francia a un peligro real. Estos comentarios han sido criticados por líderes políticos, incluyendo a Fabien Roussel, quien subrayó que no se necesitan incitaciones a la guerra. Las declaraciones llegan en un momento en que el presidente Emmanuel Macron se prepara para anunciar un plan para un servicio militar voluntario remunerado, destinado a los jóvenes que desean contribuir a la defensa nacional.