Cuatro mujeres de las Fuerzas de Defensa Australianas (ADF) han iniciado un proceso colectivo sin precedentes, acusando abusos sexuales, acoso y discriminación dentro de la institución. Las demandantes afirman que fueron agredidas físicamente y humilladas por superiores, en un ambiente marcado por el sexismo. Los abogados afirman que miles de otras mujeres podrían unirse a la acción legal, que ha sido presentada en el Tribunal Federal.
Entre las acusaciones se encuentran agresiones físicas, comentarios sexistas y tratamientos desiguales. Un portavoz de la ADF ha reconocido que el ejército está trabajando en una estrategia para prevenir abusos sexuales. Un informe reciente ha mostrado que aproximadamente 800 quejas de agresión sexual han sido presentadas en la ADF entre 2019 y 2024, pero se estima que la mayoría de los incidentes no son reportados. El abogado de las demandantes ha subrayado que las mujeres en el ejército enfrentan mayores riesgos de agresión sexual que las amenazas externas.
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