El comisario europeo Olivér Várhelyi, acusado de haber estado implicado en el reclutamiento de espías en Bruselas por parte del gobierno húngaro, niega cualquier implicación.

Las acusaciones surgen a raíz de un informe que reveló que un oficial de inteligencia húngaro se habría hecho pasar por diplomático, intentando reclutar personal de la UE como espías, mientras Várhelyi era el enviado de Hungría en Bruselas. Tras esta información, la Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, tuvo una reunión con Várhelyi, y la Comisión Europea anunció la creación de un grupo de trabajo para investigar las acusaciones.