Una gran central nuclear de Francia se vio obligada a cerrar temporalmente después de que una "invasión masiva e impredecible" de medusas entrara en su sistema de refrigeración.

El domingo por la noche, cuatro reactores de la central de Gravelines, en el norte del país, se apagaron automáticamente después de que las medusas se infiltraran en los filtros de las estaciones de bombeo. El martes por la mañana, tras la parada programada de las dos unidades restantes para su mantenimiento, toda la central permanecía fuera de servicio. Según EDF, se espera que los retrasos causados por la invasión duren toda la semana.