Adrian Codirlașu, presidente de la asociación, mencionó que el indicador y sus componentes sugieren condiciones de recesión, con un aumento significativo de las expectativas sobre el déficit presupuestario. Además, por primera vez en este episodio inflacionario, la mayoría de los participantes anticipan una disminución de la tasa de inflación, aunque el proceso será lento.
El indicador ha aumentado marginalmente en 0,3 puntos en septiembre, pero el componente de condiciones actuales ha disminuido en 4,8 puntos. Casi el 88% de los encuestados espera la depreciación del leu, y el 61% prevé la estancación de los precios de las propiedades residenciales. El déficit presupuestario para 2025 se estima en un 8,6% del PIB, y la deuda pública podría alcanzar el 59% del PIB.
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