La NASA ha confirmado que el objeto interestelar recién descubierto es un cometa que se dirige hacia la zona comprendida entre Marte y la Tierra, pero no supone ninguna amenaza.

El cometa, bautizado 3I/Atlas, fue descubierto el 1 de julio y se desplaza a una velocidad de 59 km/s, a más de 670 millones de kilómetros del Sol. Alcanzará su punto más cercano al Sol a finales de octubre, pasando a una distancia segura de 240 millones de kilómetros de la Tierra. Los astrónomos vigilan el cometa y estiman que es mayor que otros objetos interestelares conocidos. Las observaciones han revelado una cola y un halo de gas espectaculares, y el cometa será visible a través de un telescopio en septiembre.