La Ministra del Medio Ambiente, Diana Buzoianu, declaró que, a partir del martes, se llevarán a cabo trabajos por parte del operador de agua ESZ para suplementar las reservas de agua en Prahova, donde varias localidades se han quedado sin agua potable debido al aumento de la turbidez del lago de acumulación Paltinul. Los trabajos requieren la bajada del nivel del agua y son críticos para la seguridad de la presa y de la población.
Buzoianu subrayó la importancia de que las autoridades locales tengan estrategias para hacer frente a situaciones similares en el futuro. Además, acusó a las empresas estatales Apele Române y ESZ de la falta de comunicación efectiva con los alcaldes, quienes se enteraron tardíamente sobre la interrupción del agua. Actualmente, aproximadamente 100,000 habitantes están afectados, y los estudiantes de 13 localidades no irán a la escuela. Las autoridades han comenzado a suministrar agua embotellada a la población.