En la localidad de Mioveni, en el condado de Argeș, se produjo una fuga de gas, lo que llevó a Distrigaz Sud Rețele a interrumpir el suministro de gas para más de 3,600 consumidores, afectando a 176 escaleras de bloques. El incidente fue causado por una disfuncionalidad en la estación de regulación-medición Colibași, que resultó en una sobredosificación accidental del gas natural. El suministro se reanudará solo después de que los clientes contraten a una empresa autorizada por ANRE para reparar los defectos de las instalaciones de uso.
Esta medida es similar a la aplicada en el caso de la explosión en Rahova, donde Distrigaz detuvo el suministro de gas y recomendó a los inquilinos que realizaran verificaciones técnicas. En el caso de la explosión en Rahova, se constató que la empresa responsable había roto el sello puesto por Distrigaz, lo que llevó al incidente.
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