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El anuncio hecho por la empresa matriz de la aplicación, Snap, en septiembre, de comenzar a cobrar una tarifa a los usuarios que han almacenado más de cinco gigabytes de imágenes y videos distribuidos anteriormente en forma de Recuerdos, ha generado una fuerte reacción por parte de los usuarios. Muchos consideran estas publicaciones retro como una ventana al pasado, acusando a la empresa de 'avaricia corporativa' en los mensajes en las redes sociales y en las reseñas negativas en Google y la App Store de Apple.