Ayer 12:58

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Foto: Pixabay
En las recientes reuniones de Ruse, las autoridades rumanas y búlgaras pidieron la suspensión del proyecto del incinerador, considerado problemático. El embajador de Bulgaria en Rumanía, Radko Vlaikov, participó en las discusiones y subrayó la importancia de este tema, presentándolo también a sus colegas, embajadores de los estados miembros de la Unión Europea en Bucarest. Estas discusiones tuvieron lugar en el marco de una reunión con el secretario de estado del gabinete del primer ministro rumano, responsable de los problemas medioambientales. Las autoridades de ambos países expresan su preocupación por el impacto potencial del incinerador sobre el medio ambiente y la salud pública.