El trágico incidente ocurrió el 16 de octubre, cuando el hijo de la víctima descubrió el cuerpo sin vida de su padre, de 88 años, en una colina cerca de su hogar en Bicaz-Chei. La policía fue alertada a través de una llamada al 112, y el cuerpo del anciano fue trasladado al Servicio de Medicina Legal de Neamț para la necropsia. Se ha abierto una investigación por homicidio involuntario, y fuentes indican que la víctima tenía marcas de ataque de oso en las piernas.
Rumanía enfrenta un problema serio relacionado con los ataques de osos, con más de 20 personas asesinadas en los últimos 20 años y más de 250 ataques reportados. Los expertos advierten que la población de osos en Rumanía, estimada entre 10,400 y 12,700, supera la capacidad del hábitat natural, y la falta de caza preventiva contribuye al aumento del número de ataques a personas.
Fuentes