Diana Buzoianu, la ministra del Medio Ambiente, declaró que no renunciará tras el escándalo relacionado con la interrupción del suministro de agua potable en los condados de Prahova y Dâmbovița. Subrayó que la responsabilidad por esta situación no recae en el ministerio, sino en las instituciones locales. Buzoianu afirmó que las reformas que ha implementado no serán abandonadas debido a presiones políticas.
Además, reconoció que, aunque no es perfecta, no hay errores por parte del ministerio en este caso. Criticó la corrupción en las instituciones ambientales y mencionó que los problemas actuales son el resultado de décadas de negligencia. Buzoianu destacó la necesidad de reformas reales y subrayó que la situación en Prahova se agrava por estructuras ineficientes, como la Explotación del Sistema Zonal Prahova, que fue creada para asegurar empleos de lujo.
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