Los recientes cambios en el estatuto del PSD, bajo la dirección del presidente interino Sorin Grindeanu, han provocado la reacción del periodista Cristian Tudor Popescu. El nuevo estatuto declara que el PSD se presenta como un partido moderno de centro-izquierda, pero el líder Paul Stănescu ha subrayado que la orientación es más bien cristiano-demócrata, afirmando que "Sin Dios, nada es".
Popescu comentó en Facebook, sugiriendo que Ion Iliescu, el fundador del PSD, se estaría revolviendo en su tumba debido a este cambio, teniendo en cuenta que Iliescu sostenía la separación entre política y religión. Ironizó sobre la nueva dirección del partido, comparándola con un regreso a valores religiosos, y mencionó los ruidos extraños reportados por los guardianes del cementerio de Ghencea, insinuando que Iliescu estaría molesto por las evoluciones actuales del partido.