A los veteranos de EE. UU. les desagrada la retirada de las tropas estadounidenses de Rumanía, considerándola un error estratégico que debilita la disuasión frente a Rusia.

La retirada de una brigada rotativa del ejército de EE. UU. de Rumanía y otros países de la OTAN en la frontera con Rusia ha generado fuertes críticas por parte de los veteranos estadounidenses. Ellos consideran que esta decisión es un error estratégico, debilitando el poder de disuasión de la alianza y favoreciendo las acciones de Vladimir Putin, en el contexto de la intensificación de la agresión rusa en la región del Mar Negro. El Pentágono justificó la retirada como un "ajuste estratégico" para redirigir recursos hacia la región Indo-Pacífico, pero los críticos, incluido Jeremy Hunt, ex capitán de los servicios de inteligencia, sostienen que el momento es extremadamente inapropiado. Hunt subrayó que la retirada no solo representa un error táctico, sino también una retirada simbólica, disminuyendo significativamente el mensaje de disuasión que la presencia militar estadounidense enviaba a Moscú. Esta tuvo el papel de instruir a los aliados y de advertir a Rusia sobre el compromiso de EE. UU. con la soberanía de los países de Europa del Este.